LA FILOSOFIA PRESOCRÁTICA

          Por Jesús Pérez Loza

          La Filosofía Presocrática es la primera etapa de la Filosofía Griega u Occidental y se inicia en el siglo VI antes de Jesucristo, en la región de Jonia en Grecia.
Tales de Mileto
         El primer filósofo griego es Tales de Mileto (624-548 a. d. JC.), quien es además uno de los 7 Sabios de Grecia, los otros 6 son: Bías de Priene, Quilón de Esparta, Cléobulo de Lindos, Periandro de Corinto, Pítaco de Mitilene y Solón de Atenas.
          Se inició la filosofía presocrática, con la búsqueda del arké:  principio o elemento del que están hechas todas las cosas de la naturaleza. También se conoce como Arché, Arqué ó Arjé.
         Tales de Mileto aseguró, que el arké es el agua, porque según observó, este líquido elemento se encuentra en todas partes y en sus tres estados: sólido, líquido y gaseoso.
          Así que es el agua, el principal elemento y del cual provienen todas las demás cosas del Universo. Tales también se destacó como matemático y principalmente como astrónomo, toda vez que predijo el eclipse de Sol, ocurrido en el año 585 antes de Jesucristo.
           Anaximandro (611-546 a. de JC.) no estuvo de acuerdo con su maestro Tales de Mileto y sostuvo que el arké es el apeirón, una sustancia indefinida y desconocida.

Anaximandro
            El apeirón, representa un avance importantísimo dentro de la filosofía, porque se atribuyen a este  elemento características indeterminadas e indefindas, que hacen pensar a la vez que es simultáneamente una materia y un principio, algo intangible, que no percibimos por nuestros sentidos.
              Otro filósofo importante de esta alborada de la reflexión humana, es Pitágoras de Samos (582-497 a. de JC.), quien observa que en la naturaleza todas las cosas que existien, tienen una medida y un peso, por ello, llega a la conclusión que el arké son los números, puesto que para todo necesitamos de las operaciones que podemos hacer con los signos que los representan, inclusive fundó una secta religiosa y política de gran influencia, el pitagorismo.

Pitágoras de Samos
               Para Pitágoras, el 1 el el punto, el 2 la línea el 3 la superficie y el 4 el volúmen, y sin dar más explicaciones, considera que el número perfecto es el 10.
               Su Escuela Pitagórica la fundó en la ciudad de Crotona, una vez que huyó de su natal Isla de Samos, al no sopotar el la tiranía de su gobernante Polícrates.

Anaxímenes de Mileto
                   Otro elemento importantísimo dentro de la naturaleza y muy importante para los vegetales, los animales y el  mismo ser humano, es el aire, mismo que es considerado como el arké, por el filósofo Anaxímenes (570-500 a. d. JC.)
                     El aire transforma en las demás sustancias, a través de la rarefacción y de la condensación, misma que genera la tierra, el agua, las piedras, el viento y las nubes.
                   A su vez, la rarefacción sólo genera el fuego.
                   Heráclito de Éfeso (535-475 a. d. JC) se opone a los anteriores filósofos, porque niegan que sean el agua, los números,el aire ó el apeirón, el arké, porque conforme a sus cotidianas observaciones y experiencias, todo cambia. Primero está el día, al que sigue la noche y otra vez vuelve el día.

Heráclito de Éfeso
                   El agua de los ríos, no permanece quieta y siempre está circulando, por ello nunca nos bañamos en el mismo río. Inclusive la llama del fuego, es un constante fluir y cambiar y el el caso que nunca nos quemamos con la misma llama, por ello todo cambia, todo está en constante devenir y el ser es y no es al mismo tiempo. Así que llega a la conclusión que el arké, es el cambio, el fluir, el devenir.
                    Esta filosofía de Heráclito significa también un avance muy importante en el pensamiento, porque fija como esencia del ser, algo intangible, como lo es el cambio, el fluir.
                     Parménides de Elea (540-480 a. d. JC.) aparece en la discusión sobre el arjé, pero principalmente se opone al pensamiento de Heráclito y asegura que es absurdo y contrario a toda lógica, afirmar que el ser es y no es al mismo tiempo, porque esto es imposible.

Parménides de Elea
                 En efecto este filósofo, sostiene que el arké es el ser inmutable, un ente que no cambie, porque el ser, es; y el no ser, no es. Con esta reflexión, además de establecer el arké, descubre el principio lógico del pensamiento, a la vez que atribuye a su ser parmenídico, 5 atributos o cualidades: único, eterno, inmutable, ilimitado e inmóvil.
                  Parménides con su doctrina del ser, funda la Ontología, como asignatura filosófica. La Ontología, es el estudio del ser. La palabra se compone de dos etimologías: ontos = ser y logos = estudio o tratado.
                   Anaxágoras (500-428 a. d. JC.) introduce un nuevo concepto: homeomerías, que son pequeñísimas partículas espirituales de lo que están hechas todas las cosas. Para este filósofo el arché, son las homeomerías.
Anaxágoras de Clazómene
                 Introduce el concepto de nous = entendimiento, mismo que es la fuerza motora del universo y que se encarga de ordenar las homeomerías y todo lo que existe.
                Anaxágoras también bue un extraordinario maestro, porque además de filósofo era geómetra y astrónomo. Entre sus discípulos figuran el estadista Pericles, Sócrates, Demócrito, Tucídides y Empédocles.
                  Empédocles de Agrigento (493-433 a. d. JC.), este filósofo, médico, ingeniero y poeta griego, es pluralista porque no estableció un sólo componente como el arché, sino cuatro: tierra, aire, agua y fuego, que se conoce como la doctrina de los cuatro elementos y que alcanzó vigencia varios siglos hasta llegar al Renacimiento.
Empédocles de Agrigento
                   Se afirma que tuvo antepasados cretenses o ibéricos y recibió influencia de los pitagóricos, órficos y eleátas.
                   Considera que el amor tiende a unir a los cuatro elementos, como atracción de lo diferente y en cambio, el odio actúa como atracción de lo semejante.

                   Leucipo (500- 440 a. d. JC.) y Demócrito (460-370 a. d. JC.), estos filófosos coincidieron en afirmar que el principio de todo ó arké, son los átomos, pequeñisimas partículas que conservan las características de la materia y que son indivisibles.
Leucipo y Demócrito
                   El unierso está formado por lo lleno y por lo vacío. Lo lleno está formado por los átomos y en lo vacío no hay nada, está el no-ser.
                Leucipo fue maestro de Demócrito y además es autor de dos obras: La Ordenación del Cosmos y Sobre la mente. Este filósofo se anticipó a la astronomía posterior al Renacimiento, al afirmar que la Luna es el astro más cercano a la Tierra y el Sol el más alejado.
                 Demócrito dice que todo lo que hay en el universo, es una combinación de átomos y vacío. Al igual que su maestro Leucipo, define a los átomos como pequeñísimas materias indivisibles, además son eternos e indestructicles, premisa que se prolongó hasta el siglo XX, cuando los científicos lograron dividir los átomos bombardeando su núleo y liberando una extraordinaria fuerza, que originó las bombas atómicas.


         





         

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